El consumo de cemento ha caído un 0,4% en octubre, lo que supone un semestre en retroceso para este indicador. En valores absolutos, el mes pasado se consumieron en España 1.264.554 toneladas de cemento, 6.000 t menos respecto al mismo período de 2021, según reflejan los últimos datos de la Estadística del cemento. Este diferencial, aunque menor que el de los meses estivales, continúa reflejando la tendencia negativa iniciada el pasado mayo, cuando el consumo de cemento entró en números rojos.
Esta ratio ha acentuado el retroceso del acumulado anual, que ahora, a solo dos meses del cierre del año, se sitúa en un -0,3%. En valores absolutos, el consumo anual se sitúa en 12.184.022 t, con una pérdida de más de 60.000 t respecto al mismo período del pasado año.
Por lo que respecta al dato de año móvil (nov’21-oct’22), el crecimiento continúa en desaceleración, situándose en el 2,3%, lo que mantiene los valores absolutos de consumo de cemento por debajo de los 15 millones de toneladas.
La balanza comercial del cemento continúa acusando los altos costes energéticos
Las exportaciones han caído un 22% en septiembre, lo que sitúa la caída acumulada en los diez primeros meses del año en un -20%. En el mes de octubre, las importaciones se han reducido un 55%, un hecho que puede haberse visto afectado por el contexto de caída general del consumo, si bien en el acumulado anual continúan creciendo un 14,5%.
“En los 10 primeros meses del año hemos dejado de exportar 1,2 Mt de cemento y clínker, y, al mismo tiempo, nuestro país ha importado casi el mismo volumen de estos materiales. Cemento y clínker que en nuestro país se producen bajo los más altos estándares medioambientales y con costes energéticos más elevados”, indica el director general de Oficemen, Aniceto Zaragoza.